El término “belleza limpia” ha cobrado gran popularidad en los últimos tiempos, a partir del creciente interés en la salud y el bienestar. Cada vez más, marcas de belleza están lanzando sus propias líneas de fórmulas limpias. ¿Lo haces tú? Y si lo haces,  ¿sabes qué implica esta tendencia? En este texto te ofresco conocer más sobre el concepto de belleza limpia, sus elementos esenciales y su adecuado uso.

¿Qué significa que un producto se etiquete «limpio»?

¿Has leído el rotulito «limpio» en algunas marcas de belleza? Esta etiqueta destaca cualidades en productos libres de ingredientes considerados nocivos o agresivos para la piel. Aunque muchas veces estos artículos tienden a favorecer componentes de origen natural, también pueden incluir sintéticos que son considerados seguros tanto para el ser humano como para el medio ambiente.

Es importante señalar que, actualmente no existe una lista universalmente acordada de ingredientes “tóxicos” o “indeseables”, lo que significa que aún no hay consenso sobre lo que realmente constituye un producto “limpio”. Lo que sí está reglamentado es que los  artículos limpios deben informar claramente al consumidor sobre los ingredientes que contienen, así como los excluidos en su formulación. Esto te permite tomar decisiones informadas sobre los productos a seleccionar o preferir, asegurando que estén alineados con tus valores de salud y sostenibilidad.

Belleza limpia más allá de lo orgánico

 Aunque tendemos a pensar que la belleza limpia implica uso de productos exclusivamente orgánicos, veganos o naturales, esta preferencia no es necesariamente la norma. La belleza limpia puede incluir ingredientes no orgánicos, de origen animal o sintéticos, siempre que su principal objetivo sea la seguridad y eficacia del producto para el cuidado de tu piel. Es crucial para ella que selecciones marcas transparentes en su comunicación, que muestren claramente su lista de ingredientes y eviten en el marketing engañoso prometiendo una fórmula «libre de químicos».

Recuerda que, en realidad, todos los ingredientes de una formulaciónson considerados químicos, incluso el agua.

Ingredientes que afectan tu belleza limpia

Es fundamental que tomes en cuenta los rigurosos controles y aprobaciones sanitarias por las que pasan todos los productos presentes en el mercado, para así garantizar sus fabricantes y entes normativos que los ingredientes usados se aplican en cantidades seguras. Sin embargo, la tendencia de la belleza limpia busca eliminar la mayor cantidad posible de componentes que puedan representar riesgos a corto y largo plazo para el bienestar de tu piel o del planeta.

¿Y cuáles son esos componentes no deseados que deberías considerar ubicar en las etiquetas? Te los menciono a continuación:

Parabenos: conservantes que pueden alterar el equilibrio hormonal.

Aceite mineral: derivado del petróleo que puede obstruir los poros.

Ftalatos: asociados con problemas de salud reproductiva.

SLS/SLES: surfactantes que pueden causar irritación en la piel.

Triclocarbán: antibacteriano que puede contribuir a la resistencia a los antibióticos.

EDTA: usado en algunos productos como estabilizador, excepto en protectores solares.

Formaldehído: un conservante que puede ser irritante y carcinógeno.

PEGs: son ingredientes sintéticos que pueden portar impurezas nocivas.

MEA, DEA y TEA: son agentes que pueden irritar la piel y causar problemas hormonales.

Hidroquinona: es usada para aclarar la piel, pero que puede tener efectos negativos.

Parafina: un derivado del petróleo que puede obstruir los poros.

Perlas de polietileno: son exfoliantes dañinos para el medio ambiente.

Propilenglicol: un humectante que puede causar irritación en pieles sensibles.

Alquitrán de hulla:es  irritante cutáneo asociado con el cáncer.

Petrolato: un derivado del petróleo que puede bloquear los poros.

Oxibenzona: un filtro solar que puede causar reacciones alérgicas.

Fragancia mayor al 1%: contiene cientos de componentes ocultos irritantes de la piel.

BHA/BHT: son conservantes que pueden ser disruptores endocrinos.

MI/MCI: son conservantes que pueden causar sensibilización.

Tintes: pueden causar reacciones alérgicas y algunos son sintéticos.

Ten especial cuidado con los productos que dicen estar «sin conservantes». Todas las formulaciones necesitan algún tipo de conservante para mantener su estabilidad y prevenir el crecimiento de bacterias y hongos. Esto es esencial para la salud del producto y de tu piel. Optar por productos «sin conservantes» puede sonar atractivo, pero la falta de ellos arriesga la seguridad del producto yde tu piel.

Un producto sin conservantes tiene una vida útil más corta y volverse ineficaz o incluso riesgoso si se contamina.

En su lugar, busca productos que utilicen conservantes suaves y seguros que sean efectivos para preservar la integridad del producto sin comprometer la salud de tu piel. Al seleccionar productos que cuenten con conservantes aprobados y seguros, contribuyes a mantener tu piel protegida.

Es recomendable que investigues y te informes sobre los conservantes utilizados en cada producto limpio para tomar decisiones más informadas y ser parte activa del cuidado de tu piel. La clave está en encontrar un equilibrio entre su eficacia y la salud de tu piel.

Así que, al explorar el mundo de la belleza limpia, mantén tu mente abierta y tu espíritu crítico. ¡Tu piel merece lo mejor!

Mi perspectiva de belleza limpia

Cuidar de tu piel es un acto de amor y respeto hacia ti misma. Especialmente para quienes viven con enfermedades inflamatorias crónicas, elegir productos de belleza limpia puede marcar una diferencia significativa en tu bienestar diario. Cada vez que te enfrentas a la decisión de qué aplicar sobre tu piel, tienes la oportunidad de optar por lo seguro, saludable y armonioso para tu cuerpo.

Recuerda que tu piel es el reflejo de lo que pones en tu cuerpo y en tu entorno. Al elegir ingredientes más naturales y evitar toxinas potencialmente dañinas, no solo estás protegiendo tu piel, sino también apoyando tu salud general y tu sistema inmunológico. Este cambio consciente y deliberado puede ayudarte a reducir la inflamación y mejorar la sensibilidad de tu piel. Nada como sentirte cómoda y confiada en tu propia piel.

Apuesta y emprende este viaje hacia la belleza limpia. Cada pequeño paso cuenta, desde la selección de un nuevo limpiador hasta la elección de una crema hidratante. Tu piel y tu cuerpo en general te lo agradecerán. No dudes en pedirme apoyo con el tema, estaré feliz de aclarar tus dudas. Recuerda: cuidar de ti misma es un compromiso, un estilo de vida que no solo te beneficia a ti, sino también al mundo que te rodea. 

La belleza limpia no es sólo una tendencia, es un movimiento hacia la construcción de un estilo de vida más saludable, consciente y sostenible. Toma las riendas de tu bienestar y elige cuidar tu piel de una manera que te haga sentir vibrante y plena en tus acciones.

¡Te animo a dar ese primer paso hoy mismo hacia una rutina de cuidado que celebre la salud de tu piel y tu bienestar general!